Era un dia como cualquier otro en el hospital,pacientes estaban,salían,los médicos y enfermeras yendo de aquí para allá. Pablo seguia sentado frente al piano,practicando unos acordes,era la única libertad que podía tomarse estando ahí.
En realidad era lo único que necesitaba para sentirse feliz ,será que las cosas sencillas pueden traernos tanta dicha.Sus oidos se agudizaron al percibir que alguien entraba en la habitación,pero en vez de detenerse , continuó tocando, un soneto;La mano derecha cantaba la melodía , haciendo que cada movimiento las notas brillaran,una resonancia en las notas forte y los legatos podían incluso sentirse c omo una frase proveniente del ALMA .El acompañamiento la seguía muy cerca,principalmente escalas,haciendo resaltar la armonía.
No era solo la melodía que brillaba, sino Pablo mismo.
Los suaves pasos se escuchaban como una caricia.Se percibia un aroma muy parecido a la esencia del mar pero delicadammente combinado con el olor limpio del hospital.La fragancia era más nítida al igual que el sonido de las pisadas que dejaron de escucharse cundo el perfume llegó a ser más intenso.La respiración de aquella persona,que no hacía mucho había ingresado a la habitación , era tranquila, pero su corazón latía con mucha fuerza, quizás al experimentar la música que escuchaba.
La pieza terminó,se dió la vuelta para encontrar a su público . Escuchó como su aliento se inquietó al verla de frente.Las manos encontraron el rostro de ella,palpando delicadamente por las mejillas.Se extendió sobre su frente , no encontró cabello alguno.Vinieron las presentaciones con palabras.Comenzó la charla que pronto se extendió varios minutos.Era como la textura musical homófora,dos melodías interactuando.
Luego llegó la hora de interrumpir el tema,pues para ella era hora de regresar a su habitación.
Al dia siguiente sucedió lo mismo.Ambos se deleitaron con la presencia del otro.Pablo irradiaba de alegría, en cada sonido.Pasos silenciosos se acercaban . Murmullos y suspiros escaban de los labios de las ALMAS que deambulaban por los pasillos.El corazón de Ana susurraba canciones,mientras escuchaba atenta.
El muchacho se consideraba tan unido a ella que ahora era casi inconcebible el pensar en sentir la música lejos de si. Ana también estaba formando parte de su mundo,era diferente a muchas otras personas que había conocido.Todo empezó con la música y se fué desarrollando de igual manera.Lo que había entre ellos no podía ser descrito más que con sonidos.Eran notas escritaas con la misma armonía,que se reconocían y resonaban entre sí,produciendo armónicos perfectos casi unísono.
Haciendo una plegaria,inclinando su cabeza sobre el teclado,Pablo dejó escapar unas notas cubriendo un susurro.Sin interrumpir ella se detuvo a escucharlo.
Más allá de la música,entre la oscurida,se escucharon sollozos.Palabras desesperadas que pedían ayuda.El dejó de tocar ,Ana seguía suplicándole,por lo mas importante para ella, su propia vida.Había cosas inconclusas,pero sobre todo el temor y la angustia de dejar este mundo.
Pablo no lo dudó,decidió darle más compases de vida.aunque fueran los suyos.Habia disfrutado cada nota y silencio.
El muchacho se entregaba en cada frase,seguía el capricho de la música.Ella lo recibió todo,la vida.Pero la pieza estaba dando a su fin, Pablo estaba exhauto.La cadencia era perceptible.Fué la mejor interpretación,su existencia misma.Él último sonido aun seguia resonando cuando el cayó apoderado del cansancio sobre su cama.Como una nota final y breve el suspiro de sus labios escapó junto con su ALMA.
Una alegría invadió todo su ser,ahora estaba viva y con muchas ganas de continuar así.Se dedicaba considerablemente a su familia, a hacerlos felices, pero con un sabor agridulce en los labios, pues los recuerdos no la dejaban y ella intentaba seguir sonriendo,diciéndose a si misma que nada más importaba en ese momento,sólo la dicha que sentía.
La joven despuçes de un tiempo,sin tener ya ese algo que le daba la vida,comenzó a decaer.Las cosas que tanto quería hacer quedaron nuevamente inconclusas y esta vez sin esperanza de poder continuarlas. La margura era saborada tan profundamente que quedó grabada en su pecho.
Compases de silencio.Recostada en su cama se pasó los días pensando.¿Qué era lo que hacia mantenerse bien?.
Solo quería una última cosa,escuchar de nuevo esa música tan querida.Pero nadie podía darle eso, la única persona que podía hacerlo ya no estaba ahí,y todo fue por ella,sus parpados cayeron en resignación,ese sonido familiar llegó entonces a sus oidos, y un sentimiento cálido la invadió , él
estaba esperándola.
15 comentarios:
... un beso...
Marea@
Lunita,conmevedora historia de amor triste pero a la vez llevada la muerte con música.
un abrazo muy pero que muy fuerte .
Javier
Precioso relato ayss y un poquito triste.
Un saludin
Preciosa historia, parece que el amor con la tristeza no deja de ser bonito, un saludo
Luna, una belleza esta historia de amor, y aunque triste es serena, desde el el lugar de "acepto esto que me ha tocado".
Hermoso
Un beso
Secretos mudos...
Tal vez con pocas lagrimas.
Pero con la capacidad del recuerdo del disfrute por lo apercibido...
Besos.
bello, bello como la imagen
un abrazo
preciso luna...simplemente precioso...
Triste pero hermoso. Besos
Muy hermosa esta historia entre Pablo... y su música. Y bonito recuerdo el fotograma de El pianista. Gran pelíucula.
hola luna!!! Me encantó tu historia de amor!!!
Bsss.
Felicitaciones por el PREMIO AMOR PERFEKTO
Un abrazo,
Verónica desde El Mundo de Wilhemina Queen
Luna!; ahora sabemos dnd estabas.... estos deben ser tus primeros pinitos...!!!
se que te gusta mas la poesia, pero este relato es muy lindo!! te felicito!
segui disfrutando escribiendo, y dejando hablar a tu corazon..
te mando un beso!
es bello... pero no deja de parecerme triste...
Cuando la sombra falsa de mi cuerpo
se pierda tras la neblina de un falso adiós;
recuérdame sin esas lágrimas;
Y olvídame como ese amor eterno.
Te dejo un beso,y te espero.
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